- Escúchate con atención sin juzgarte, tu diálogo interno y externo. ¿Cómo te comunicas contigo y con el otro? ¿Qué piensas de ti, de los demás y de la Vida? Reconoce e identifica las creencias que te limitan.
- Comprende que tus creencias están ancladas en tu inconsciente, crean tu realidad y son programaciones mentales que se pueden transformar.
- Según las creencias que tengas, así avanzarás o te limitarás en tu vida, impulsándote o bloqueándote. Según cómo piensas, así hablarás, actuarás, sentirás y crearás tu realidad. A mayor calidad de tus pensamientos, mayor calidad de vida.
- Acepta y asimila que las creencias que te definen se conformaron por lo que te enseñaron y lo que viviste. Que quienes te enseñaron, no lo supieron hacer mejor porque también heredaron esas creencias, y que hiciste lo que pudiste como mejor supiste.
- Tienes el poder de transformarte, el cerebro es plástico, tremendamente flexible y con el entrenamiento adecuado se debilitarán los recorridos mentales antiguos para generar y activar nuevos, aquellos que te impulsen, motiven, te den mayor paz y bienestar emocional, físico y mental.
- Viniste a trascenderte a ti mismo. En ti está tu mayor reto y la mayor satisfacción. Puedes conseguirlo. Si quieres, puedes, has de mantenerte firme y ser muy comprensivo y paciente contigo mismo. Ámate profundamente y ayúdate así. Conseguirás mayores resultados.
- Pide ayuda si lo necesitas, todos necesitamos ayuda alguna vez. Es más sencillo identificar las creencias que te limitan con un profesional que sepa trabajar con el inconsciente y manejar adecuadamente las emociones que se puedan manifestar.
- Recuerda que todos estamos aprendiendo, que realmente no existen los errores, son ensayos para el crecimiento, oportunidades para darte cuenta y crecer.
- Tienes el poder, tú decides, es tu responsabilidad.
- Date la oportunidad de seguir creciendo y sirve de ejemplo a los demás.
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